Adentrándose en el fascinante mundo de la música instrumental, Síndrome de Stendhal emerge como un trío que busca desencadenar sensaciones únicas y reavivar la magia de las décadas doradas (50s, 60s y 70s). Inspirados por obras de arte y la cultura popular, el trío nos invita a su propio «Banquete», una experiencia sonora que promete provocar emociones intensas y, quizás, desencadenar un síndrome propio de Stendhal.
El Síndrome de Stendhal:
El nombre del grupo toma prestado el concepto del Síndrome de Stendhal, un trastorno psicosomático que puede provocar reacciones físicas intensas cuando se expone a obras de arte consideradas excepcionales. En este caso, Síndrome de Stendhal canaliza esta intensidad en su música instrumental, creando una experiencia única para sus oyentes.
Explorando el Amor a través de «El Banquete»:
En su más reciente creación, «El Banquete», Síndrome de Stendhal nos transporta a los diálogos filosóficos de la antigua Grecia, específicamente al libro «El Banquete» de Platón. Este trabajo literario ofrece reflexiones profundas sobre el deseo como motor de virtudes como la valentía, la nobleza y la generosidad. La música de Síndrome de Stendhal sirve como una banda sonora evocadora, acompañando las ideas del filósofo griego.
Detalles Técnicos:
La composición de «El Banquete» lleva la firma de Luis Álvarez, con arreglos de Miguel Vinueza. La producción, a cargo de Luis Álvarez en Luisound Estudios, asegura una calidad sonora excepcional que complementa la riqueza conceptual de la pieza. El video y animación, realizados por Javier Macanchí, añaden una dimensión visual única a la experiencia.
Producción Ejecutiva y una Invitación al Banquete:
La producción ejecutiva, liderada por Miguel Vinueza, demuestra un compromiso total con la excelencia artística. Esta creación musical es más que una simple pieza; es una invitación a un banquete emocional, donde la música se convierte en el manjar que nutre el alma.
Síndrome de Stendhal, con su enfoque único en la música instrumental y su capacidad para traducir conceptos filosóficos a melodías cautivadoras, nos sumerge en un viaje sensorial. «El Banquete» no solo es una pieza musical, sino una experiencia completa que despierta la mente y el corazón. A través de esta invitación al banquete musical, Síndrome de Stendhal demuestra que la música puede ser mucho más que sonido; puede ser una obra de arte que despierte emociones profundas y nos conecte con la esencia misma de la creatividad humana.
